domingo, 19 de febrero de 2012

Luna Miguel





Black water


Pensemos en un hospital lleno de gatos
pensemos, los huesos se comen a los huesos,
las uñas son un gesto
el esqueleto felino
su olor
pensemos en gaviotas y en carroña
en ese color que maúlla
en ese color
como aquel momento sólo como aquel momento
en que las ratas se esconden
miau
miau
se esconden porque el cielo habla de tormentas
o ese momento exacto en que hasta el sol se
marcha y el cielo suena vacío revolviendo la mañana
para que caigan sucios sus copos
ese aquel ese aquel miau ese
pensemos quimioterapias y pulmones
pensemos en derramar nata sobre ciruelas muertas
pensemos en ese y en aquel
el gato está en la silla y se ha portado mal como se portan los mundos
cuando maduran
aquí el mundo ya no crece porque hay vacas que nos guiñan el ojo
y aves defendiéndose del cuchillo
pensemos como ciudades como mujeres como mujeres que olvidan
pensemos en el nombre de Joan-Marc
pensemos la lectura en la cocina
la ternura
ahora
ahora que con las flores me mudo a Marruecos
pensemos en el ruido en el premio
en la siesta de los sábados
pensemos que el hospital está lleno de gatos y no hay manera
no, no hay manera de sacarlos. 

LUNA MIGUEL (Alcalá de Henares, 1990)

3 comentarios:

BIBLIOTECA dijo...

Joven autora española que trabaja en internet. Si le interesa, siga su blog

javichu dijo...

me gusta, poema valiente, bien cocteleado...

Anónimo dijo...

Luna Miguel es muy buena! Es de verdad muy buena... para curar el estreñimiento. En serio yo leo un poema suyo y siento inmediatamente el efecto diurético de sus textos y debo correr al servicio.

ADVERTENCIA: el efecto diurético sólo se dará en lectores de verdad. Si por el contrario sus textos son consumidos por pardillos seguramente causaran alucinaciones como ver a Luna Miguel como escritora o periodista. Los efectos colaterales de este segundo caso pueden ser: demencia como pérdida parcial o total del juicio.